Estamos casi a las puertas de la Semana Santa, y muy pronto las televisiones programarán películas que nos hagan recordar aquellos inmortales sucesos. Entre todas las cintas, “La Pasión de Cristo”, de Mel Gibson, destaca por la fuerza de sus imágenes y la profundidad teológica.
En mi libro “Jesucristo en el cine” dedico bastante espacio a comentar un aspecto de este filme: la relación entre Cristo y su Madre que vemos en las escenas del Vía Crucis. Una relación maravillosa, llena de matices –humanos y sobrenaturales- que ayuda a entender la íntima fusión de sus almas en la común tarea de la Redención.
Para completar lo que de esa relación señalan los Evangelios, Gibson se inspiró en antiguas tradiciones cristianas. Una de ellas es el encuentro del Señor con su Madre, justo después de su primera caída. Jesús cae bajo el peso de la cruz, y la Virgen se apresura a socorrerle. Un oportuno flash-back nos traslada a una escena paralela de la infancia, cuando Jesús niño tropieza y cae, y María se apresura a también a socorrerle: “Aquí estoy, a tu lado”, parece decir en ambas escenas. La transposición de planos temporales establece aquí un marco muy emotivo, que invita al espectador a la reflexión y a la contemplación.
Por otra parte, el encuentro de ambos en esta escena adquiere un significado muy especial, muy teológico: la Virgen se nos muestra totalmente volcada en cumplir la Voluntad de Dios, y Jesús aparece con una clara conciencia de estar redimiendo a la humanidad: “¿Ves, Madre, como hago nuevas todas las cosas?”.
En apoyo de esta idea, quiero aportar ahora las citas de algunas críticos cinematográficos que han señalado también esta profunda afinidad:
1. “La Pasión de Mel Gibson”, por Juan Orellana: Director del Departamento de Cine de la Conferencia Episcopal Española
“Mel Gibson se ha aproximado a una historia mil veces contada en el cine, una historia conocida hasta en sus diálogos, sus escenas, personajes y tramas secundarias, y ha sabido recrearla y adecuarla al lenguaje cinematográfico moderno de tal forma que sorprende, impacta, emociona, e incluso puede afectar a lo más hondo del corazón y la conciencia del espectador. (…) Fiel a la historicidad de los sucesos, Gibson se permite unas licencias –como todos los cineastas que han llevado a Jesús a la pantalla–, que son sencillamente deliciosas. Licencias que podrían haber ocurrido perfectamente, pero de las que no tenemos constancia. Por ejemplo, (…) si nos fijamos, varias veces que Cristo cae, encuentra fuerzas para incorporarse cuando sus ojos descubren a su Madre. Otra invención preciosa que aparece en la película es un flash back muy breve en el que Jesús toma el pelo a María en su carpintería de Nazareth, mientras inventa la mesa moderna. “Eso no tiene futuro”, le dice María”. (Ver aquí el artículo entero).
2. “La Pasión de Cristo”, por Juan Manuel de Prada: Escritor y columnista
“Habría que anticipar, antes de referirnos a otros aspectos más concretos, que Mel Gibson ha querido completar una obra declaradamente católica. Aunque en Estados Unidos hayan sido las comunidades evangélicas quienes con más ahínco la han defendido, la película aborda algunos asuntos medulares de la fe católica –así, el vínculo existente entre el sacrificio de la Cruz y el sacrificio de la misa– que un protestante no puede llegar a comprender plenamente. Su catolicismo militante se trasluce, sobre todo, en el tratamiento de la figura de María, a quien en todo momento se muestra sabedora y consciente de la misión salvífica de su Hijo. (…) Pienso, también, en uno de los momentos más sublimes de la película, en el que María pega el rostro al suelo; un pudoroso movimiento de cámara nos descubre que, justamente debajo de ese lugar, se halla Jesús, aherrojado en una mazmorra: la empatía entre madre e hijo que se transmite en estos fotogramas es de una delicadeza conmovedora”. (Ver aquí el artículo entero).
3. “La Pasión de Cristo: el Hijo y la Madre, según Mel Gibson”, de Julio Rodríguez Chico: Autor de la web “La mirada de Ulises”
“Me llama la atención la conseguida ambientación de un momento histórico concreto y especialmente la recreación de unos personajes que caminan a distinta velocidad y por distinta órbita que el resto. Vemos cómo Jesucristo y su madre María parecen saborear la trascendencia de unos momentos sublimes para la Humanidad, que son a la vez inefables para el espectador del Gólgota y para el de la sala de cine. Ellos no entienden de violencia, venganza ni odio… y su rostro en cambio sí refleja la serenidad y paz, y también intimidad y dulzura de una relación que supera a la de madre-hijo. De ahí esos flash back en que se evocan tiempos de la infancia o de la juventud en el taller, o esas miradas que Jim Caviezel y Maia Morgenstern llenan de contenido y profundidad su relación y la misma pantalla. (…)Por eso, “La Pasión de Cristo” no es solo un film histórico sino que fundamentalmente es una película de personajes, y no es solo una cinta con violencia o sangre –sería un grave reduccionismo– sino de actitudes vitales ante la verdad de uno mismo y de lo que sucede alrededor”. (Ver aquí el artículo entero).
Feliz Semana Santa. Y feliz cine para estos días tan especiales.
En mi libro “Jesucristo en el cine” dedico bastante espacio a comentar un aspecto de este filme: la relación entre Cristo y su Madre que vemos en las escenas del Vía Crucis. Una relación maravillosa, llena de matices –humanos y sobrenaturales- que ayuda a entender la íntima fusión de sus almas en la común tarea de la Redención.
Para completar lo que de esa relación señalan los Evangelios, Gibson se inspiró en antiguas tradiciones cristianas. Una de ellas es el encuentro del Señor con su Madre, justo después de su primera caída. Jesús cae bajo el peso de la cruz, y la Virgen se apresura a socorrerle. Un oportuno flash-back nos traslada a una escena paralela de la infancia, cuando Jesús niño tropieza y cae, y María se apresura a también a socorrerle: “Aquí estoy, a tu lado”, parece decir en ambas escenas. La transposición de planos temporales establece aquí un marco muy emotivo, que invita al espectador a la reflexión y a la contemplación.
Por otra parte, el encuentro de ambos en esta escena adquiere un significado muy especial, muy teológico: la Virgen se nos muestra totalmente volcada en cumplir la Voluntad de Dios, y Jesús aparece con una clara conciencia de estar redimiendo a la humanidad: “¿Ves, Madre, como hago nuevas todas las cosas?”.
En apoyo de esta idea, quiero aportar ahora las citas de algunas críticos cinematográficos que han señalado también esta profunda afinidad:
1. “La Pasión de Mel Gibson”, por Juan Orellana: Director del Departamento de Cine de la Conferencia Episcopal Española
“Mel Gibson se ha aproximado a una historia mil veces contada en el cine, una historia conocida hasta en sus diálogos, sus escenas, personajes y tramas secundarias, y ha sabido recrearla y adecuarla al lenguaje cinematográfico moderno de tal forma que sorprende, impacta, emociona, e incluso puede afectar a lo más hondo del corazón y la conciencia del espectador. (…) Fiel a la historicidad de los sucesos, Gibson se permite unas licencias –como todos los cineastas que han llevado a Jesús a la pantalla–, que son sencillamente deliciosas. Licencias que podrían haber ocurrido perfectamente, pero de las que no tenemos constancia. Por ejemplo, (…) si nos fijamos, varias veces que Cristo cae, encuentra fuerzas para incorporarse cuando sus ojos descubren a su Madre. Otra invención preciosa que aparece en la película es un flash back muy breve en el que Jesús toma el pelo a María en su carpintería de Nazareth, mientras inventa la mesa moderna. “Eso no tiene futuro”, le dice María”. (Ver aquí el artículo entero).
2. “La Pasión de Cristo”, por Juan Manuel de Prada: Escritor y columnista
“Habría que anticipar, antes de referirnos a otros aspectos más concretos, que Mel Gibson ha querido completar una obra declaradamente católica. Aunque en Estados Unidos hayan sido las comunidades evangélicas quienes con más ahínco la han defendido, la película aborda algunos asuntos medulares de la fe católica –así, el vínculo existente entre el sacrificio de la Cruz y el sacrificio de la misa– que un protestante no puede llegar a comprender plenamente. Su catolicismo militante se trasluce, sobre todo, en el tratamiento de la figura de María, a quien en todo momento se muestra sabedora y consciente de la misión salvífica de su Hijo. (…) Pienso, también, en uno de los momentos más sublimes de la película, en el que María pega el rostro al suelo; un pudoroso movimiento de cámara nos descubre que, justamente debajo de ese lugar, se halla Jesús, aherrojado en una mazmorra: la empatía entre madre e hijo que se transmite en estos fotogramas es de una delicadeza conmovedora”. (Ver aquí el artículo entero).
3. “La Pasión de Cristo: el Hijo y la Madre, según Mel Gibson”, de Julio Rodríguez Chico: Autor de la web “La mirada de Ulises”
“Me llama la atención la conseguida ambientación de un momento histórico concreto y especialmente la recreación de unos personajes que caminan a distinta velocidad y por distinta órbita que el resto. Vemos cómo Jesucristo y su madre María parecen saborear la trascendencia de unos momentos sublimes para la Humanidad, que son a la vez inefables para el espectador del Gólgota y para el de la sala de cine. Ellos no entienden de violencia, venganza ni odio… y su rostro en cambio sí refleja la serenidad y paz, y también intimidad y dulzura de una relación que supera a la de madre-hijo. De ahí esos flash back en que se evocan tiempos de la infancia o de la juventud en el taller, o esas miradas que Jim Caviezel y Maia Morgenstern llenan de contenido y profundidad su relación y la misma pantalla. (…)Por eso, “La Pasión de Cristo” no es solo un film histórico sino que fundamentalmente es una película de personajes, y no es solo una cinta con violencia o sangre –sería un grave reduccionismo– sino de actitudes vitales ante la verdad de uno mismo y de lo que sucede alrededor”. (Ver aquí el artículo entero).
Feliz Semana Santa. Y feliz cine para estos días tan especiales.
Hay una escena en el via crucis que es muy emotiva y con gran valor teológico. María pide a Juan que le ayude a acercárse a Jesús en el via crucis, y en una interseción de la calle vemos a María sin aliento por la carrera, pero al mismo tiempo da la impresión de que tambien le falta valor para acercarse a su hijo. Aparece Jesús con la cruz y cae bajo su peso. Esto sacude el amor de María y la impulsa hasta el hijo para transmitirle las fuerzas que le quedan.
ResponderEliminarJesus imprime al gesto de amor de la madre el sentido de la victoria final de Cristo sobre el mal "Yo hago nuevas todas las cosas". No es el fin sino el comienzo de la vida eterna reservada a los pecadores que creen en Jesucristo y su Iglesia.
Que hermosa explicación!
EliminarHay otro tema que no veo: Jesus consuela a las mujeres. En el mensaje de Jesus a Y Maria de Getsemani, dice que ellas, somos nosotros, las mujeres y hombres piadosos de estos últimos tiempos. Que estamos llamados a la contemplación y oración. http://tambienestuya.com/?page_id=764
Ademas el tema que Maria con sus santas manos, tocaron el cuerpo de Jesus durante la sepultura. Por eso y muchas mas razones, solo manos santas y puras, consagradas, pueden tocar el cuerpo de Cristo: sacerdotes consagrados.
Gracias por tu explicación.
EliminarPor extraño que parezca, no he visto la película LA PASION DE CIRSTO, de Mel Gibson, pero la voy a alquilar para verla despacio. Después de todo lo que conozco de ella, seguro que la viviré de lleno, especialmente en estos dias. Me gusta mucho el cine, pero nunca he tenido el tiempo suficiente para ver un número mínimo de grandes clásicos, ni siquiera las buenas películas que echan en la televisión. Agradezco tus sugerencias. Josefina.
ResponderEliminarDIOS SANTO...PERDONANOS Y DANOS LAS FUERZAS PARA SEGUIR ADELANTE TODOS LOS DIAS...
ResponderEliminarMyriam Andrades
ResponderEliminarLa escena del encuentro en el calvario es muy dulce, humana y conmovedora. A Jesús y su madre los muestra únicos, perfectamente unidos y compenetrados uno en el otro, indivisos en un amor sobrehumano. En esta escena cuando se une la mirada de uno y otro, desde ese encuentro y en el cruce de ojos de apenas unos segundos, ellos, ambos se dicen muchas cosas, lo que saben, lo que los une; se ve el efecto de la común-unión, la complicidad de ambos, la serenidad que le transmite su madre y en las certezas y confianza que ambos se transmiten. La escena nos transporta a la vida en común y a comprender que Jesús nunca estuvo sólo, siempre supo la tenía a ella, contaba con ella, con su amor. Transmiten ser uno. Ella amándolo, animándolo, retándolo, unidos en una verdad. La escena conmueve, llena de extraña dulzura que pese a las circunstancias, vemos en el encuentro de los ojos, que en esa mirada ambos se fortalecen, ella le da fuerzas, valor; El, la robustece en la aceptación. Esta mirada, que es una contemplación, lleva a experimentar aliento, aceptación pese a las circunstancias de la escena, todo valía la pena y ambos tenían la oportunidad de vivir y experimentar juntos lo que sentían. Desde esta complicidad que los hacía uno en el amor y que muy bien transmiten en el encuentro, percibimos que: a la complicidad que los lleva una verdad, es evidencia de lo que Dios es en ellos.
Bueno para opinar mi escena favorita en esta pelicula, es y creo que pienzan muchos lo mismo, es cuando Jesus cae por segunda vez y su madre va a ayudarlo y este le contesta "Ves madre, yo hago nuevas todas las cosas" escena que me hizo llorar Y-Y, y creanme que eso si que es dificil de conseguir, a lo que queria comentar era que se refieran a la madre de Jesus, como tal: "La Madre de Jesus" por que no es la virgen maria, ya que Jesus tenia un hermano menor, es decir que su madre aun que haya tenido a jesus por obra del espiritud santo, tubo un hijo con Jose su esposo, el cual fue el hermano menor de Jesus, asi que No es ninguna virgen, en segundo lugar, si fuera el caso "Cosa que no es posible" todavia deberian señalarla como "la madre de jesus" ya que ella no es nadie a quien deberiamos adorar o si quiera pedir perdon, solo Jesus, que era el mismo hijo de DIOS, ni si quiera el pidio que lo adoraren, el nos manda obedecer a su padre es decir DIOS mismo, y solo el debe ser objeto de adoracion, es una lastima que seamos tan idolatras inclinandonos ante cualquier imagen y adorarla en nombre de DIOS, pero claro esta que el Diablo a llegado a la tierra para Engañar, matar y destruir y que no fueramos salvos, por eso nos hace caer en pecado, asi que ya saben, mas detalles en mi proxima visita, ahi nos leemos bye... xD.
ResponderEliminarHay que entender antes que nada que esto es cine, aunque basada en los evangelios y en las visiones apocalipticas de la monja alemana agnes, es cine, y lo que al cine le interesa es mostrar (que el espectador vea) algo interesante, entretenido, que durante dos horas no se despeje de la pantalla sea el resultado que sea, es verdad que esta pelicula tiene muchas contradicciones y cosas que en la biblia no suceden, sin embargo hay que tener en cuenta el concepto de que es una movie hecha en 2004 por gringolandia, en si me parece una buena pelicula, retrata muchos aspectos, nos hace reflexionar y pensar sobre el sufrimiento de jesus, la verguanza, el dolor, ademas de que jesus es el protagonista en ella, aunque presentado como el injuriado y a quien se lo va ha filetear a lo largo de la cinta, tiene dotes de semidios, que le permiten aguantar el doloroso y sadico paisaje que gibson nos muestra, otra cosa que los criticos de esta pelicula no dicen es que en realidad si uno lee los evangelios, la pasion desde el rezo en el huerto hasta que descuelgan el cuerpo, lo relatan como un hecho muy cruel, sin ir al transbordo de las visiones de la monja Agnes,l mi escena favorita de la pasion en si (no solo de la pelicula, en la pelicula la retratan bien pero esperaba mas) es el ECCE HOMO la presentacion de cristo al pueblo despues de ser azotado, ultrajado, con la corona de espinas y el manto rojo, es algo sacado del vuelo mas loco y sadico de todos, mi escena favorita de la cinta es el via cruxis, no puede ser mas dramatico ni doloroso, en verdad es un evento indescriptible y de mero sufrimiento, gibson lo retrata muy bien...(checar los primeros planos del rostro de jesus durante la caminata al calvario, algo sacado del imaginativao catolico mas barroquista y san franciscano posible) otro aspecto a denotar es el gran tinte catolico de la peli, desde el protagonismo de maria, hasta la forma en la que jesus carga la cruz y es crucificado, no es una pelicula cristiana ni evangelica es 100%55 catolica.
ResponderEliminarCualquiera que sea nuestro credo no podemos negar que es una excelente pelicula...muy asertada...y muy realista...aunque ha algunas personas no nos guste ver el espejo de nuestra maldad cuando alguien nos la hace ver...
ResponderEliminarque en esta semana santa ,dias de reflexion pero que sea una reflexion desde lo mas hondo de nuestros corazone y pedir perdon por el mal que hemos cometido con nuestros ,semejante y talves hemos deseado los bienes ajenos ,yo rezare y pedire por todos ustedes amigos ,amigas,madres,hermanos ehijos que dios y la virgen ilumine vuetros corazones y les llene de bondad y dulcura para ofrecer asus semejante como dice un texto de reflexion ,NOES SALVO AQUEL QUE DICE SEÑOR SEÑOR , SI NO AQUEL QUE HACE LA VOLUNTAD DE MI PADRE QUE DIOS LOS VENDIGA AMEN
ResponderEliminarte has preguntado ¿cuantas lagrimas haces derramar tù a Maria?
ResponderEliminardeben de ser muchas las lagrimas que nuestra madre derrama quizas porque no, nos queremos acercar a su hijo con amor profundo ; la Santisima virgen Maria lo que hace es quitarnos las vendas del mundo y hacernos ver a Nuestro Señor Jesus con los ojos de la fe!!
ResponderEliminarJesús NO tuvo hermanos de sangre por parte de María. Dejemos de ver a María como una mujer como otras, ella fue el Vaso Sagrado donde habitó Jesús antes de venir al mundo, la elegida del Padre para ser la Madre de Dios, fue Virgen antes, durante y después del parto.
ResponderEliminarLastima que seas Anonimo. Felicitaciones por tus palabras!Ahh no! Iva C. que dios te bendiga a ti tam!
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